MARÍA ISABEL ÁLVAREZ/ALQUIFE
Cuando encendemos nuestra televisión siempre cogemos nuestro mando y pasamos canal a canal para encontrar algo que podamos ver. Podemos ver un documental, informativos, programas de entretenimiento y, como es costumbre, algún programa de corazón.
A simple vista puede parecer que todos los programas son iguales, pero hay muchas diferencias.
Los documentales siempre nos enseñan algo sobre la naturaleza, algo de historia, de cualquier tema, pero nos intentan enseñar algo. Los informativos tratan de tenernos informados de lo que pasa en nuestro país y en el mundo, pero los programas de corazón: ¿qué nos enseñan? ¿Nos enseñan la vida de alguien? ¿Quieren mantenernos informados? ¿Para qué sirven?
Estos programas hablan sobre personas, sobre sus vidas, sobre qué les ha pasado... Este tipo de gente del que ellos hablan, que parece que su vida ha sido muy difícil, no suelen haber hecho nada importante, ni siquiera se les puede considerar importantes, llegan a la fama a través de mentiras y mentiras.
Otra diferencia es que en los documentales o informativos hay gente preparada, gente que prepara su trabajo, que ha estudiado. En los programas de corazón, cotilleo o como cada uno quiera llamarle, los únicos que se han formado son los cámaras, técnicos de sonido, etc. y muy pocas veces la gente que se sienta en el plató para hablar de cualquier tema.
En estos programas, lo único que se intenta es ganar audiencia a través de personas que hablan sobre otras, sobre sus vidas, sus temas amorosos, de lo que sea, de cualquier cosa que intente atraer a la gente. Para hablar de ellos no lo hacen respetando su turno, dando cada uno su opinión, sino que lo hacen hablando uno por encima del otro, sin escucharse, sin respetarse, incluso con insultos. Si nos ponemos a pensar, ¿es esto lo que nos enseñan cuando somos pequeños? ¿Cuántas veces nos han dicho: hay que respetarse?
La mayoría de sus seguidores suelen ser personas mayores, amas de casa y alguna gente joven.
Estos programas se suelen emitir sobre todo por la tarde y por la noche, para que más gente pueda verlo.
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